Este artículo aborda la problemática de los jóvenes que abandonan prematuramente el sistema educativo a partir de una investigación reciente, financiada por el Ministerio de Ciencia e Innovación (MCINN)1 en la que se estudia la inclusión social y profesional de los jóvenes a partir de los datos la encuesta ETEFIL 2005 (Encuesta Transición, Educación, Formación e Inserción Laboral, de jóvenes de menos de 25 años) realizada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y el Ministerio de Educación (MEC) con una muestra representativa para el territorio español (3.012 jóvenes que abandonan sin acreditación la escuela obligatoria). La encuesta ETEFIL 2005 del INE ha permitido una aproximación longitudinal y biográfica que reconstruye los itinerarios formativos y de trabajo, que es una característica de la perspectiva teórica y metodológica de nuestro grupo de investigación. Tras una aproximación conceptual al abandono escolar, los autores realizan un análisis diacrónico de los itinerarios de abandono escolar y la heterogeneidad de perfiles que los configuran. Se analiza la relación entre itinerarios formativos y laborales y se constata el bajo valor añadido del graduado en Educación Secundaria Obligatoria (ESO) para el mercado de trabajo. Tras una aproximación cuantitativa a las trayectorias laborales de los jóvenes y a sus procesos de movilidad, se formulan conclusiones relacionadas con el predominio de la ocupación en empleos de baja o nula cualificación y con los efectos de la coyuntura económica en las trayectorias de inserción profesional a medio y largo plazo. Por último, se apuntan algunas reflexiones sobre las rigideces del sistema educativo español auspiciado por la LOGSE (1990) a la hora de facilitar el retorno a la formación y sobre el reto de la escuela obligatoria para dar respuestas de éxito a estos alumnos, especialmente, teniendo en cuenta la relevancia de la primera oportunidad y la menguada presencia de las denominadas �vías de segunda oportunidad�.