Málaga, España
Este artículo pretende profundizar en la necesidad de pensar en nuestro mundo digitalizado las relaciones educativas: cómo la hegemonía tecnológica mediatiza las mismas y cuáles pueden ser los principales desafíos que emergen de todo esto. Para ello, en primer lugar, sitúa el concepto de relación educativa en la complejidad existente y las tensiones que dan forma a las nuevas maneras de relacionarnos con los demás y con nosotros mismos con la influencia de las pantallas y las implicaciones pedagógicas derivadas. Posteriomente, se establecen una serie de paradojas vinculadas directamente con la hiperconexión como nueva forma de estar en el mundo y comunicarnos: las paradojas de la atención, la actividad, la memoria y la privacidad y la prohibición, las cuales se están transformando desde concepciones y prácticas derivadas del uso de las tecnologías informacionales, sobre todo las redes sociales y la inteligencia artificial. Estas paradojas permiten problematizar la realidad de estos términos y tiene consecuencias pedagógicas relacionales que son analizadas. Finalmente, se establecen una serie de conclusiones con ánimo propositivo para que nos ayuden a seguir pensando y haciendo de las relaciones educativas un referente que no se diluya entre la datificación y la saturación de imágenes.
This article seeks to analyse the need to reflect on educational relationships in our digitalised world, namely how they are shaped by technological hegemony and the key challenges that arise as a result. The concept of educational relationships is initially examined within the complexities and tensions that define contemporary modes of interaction –both with others and ourselves– under the influence of screens, alongside their pedagogical implications. The study identifies several paradoxes directly associated with hyperconnectivity as a new way of living and communicating: the paradoxes of attention, activity, memory, privacy, and prohibition, all of which are being redefined by practices and ideas shaped by informational technologies, especially social media and artificial intelligence. These paradoxes enable a critical examination of the reality of these concepts and their implications for relational pedagogy, which are analysed in this study. Finally, the study offers a series of conclusions with a constructive intent, aimed at fostering continued reflection and ensuring that educational relationships remain a key reference point, undiluted by the challenges of datafication and image saturation.