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Lo digital constituye un campo sobre el que también se focalizan las acciones indagación y análisis cuando se quieren esclarecer determinadas cuestiones o litigios, pues en ese ámbito también se evidencian conductas de individuos o prácticas en organizaciones. De hecho, es habitual que ese tipo de actuaciones se realicen en escenarios corporativos, por ejemplo: durante una investigación interna o como consecuencia de la ejecución de un sistema de gestión de compliance. Pues bien, la enorme cantidad de información existente en los dispositivos informáticos hacen prácticamente imposible el estudio individual de cada uno de sus elementos. Esta circunstancia ha impuesto que, cuando se quiera examinar determinadas evidencias digitales recabadas, deba recurrirse a procesos de estudio que, siendo rigurosos, resulten factibles. A tal efecto, se ha desarrollado un procedimiento de análisis de la evidencia digital que extrae de la misma el conjunto de elementos relevantes que guardan relación con el objeto de la indagación: el procedimiento denominado E-Discovery. Además, podría completarse con otros que posibilitan la extracción de conclusiones con sustento en los elementos relevantes. En el presente artículo se abordan tales procesos, su configuración, cuestiones que plantean, contenido esencial y el posible encaje entre el elenco de medios de prueba existentes dentro del proceso judicial.
Digital is a field in which research and analysis actions are also carried out when we want to clarify certain issues or litigation, because in this area also evidences behaviors of individuals or practices in organizations. In fact, it is common for such investigative actions to be carried out in companies, for example, during an internal investigation or as a result of the implementation of a compliance management system. The large amount of information on IT devices makes it practically impossible to study each of its elements individually. This has imposed that, when we want to examine certain digital evidence, it is necessary to resort to study processes that are feasible. For this reason, a procedure, that extracts the set of relevant elements related to the object of the investigation, has been developed for analyzing digital evidence: the procedure called E-Discovery. In addition, it could be completed with others that make it possible to draw conclusions based on the relevant elements. This article analyzes such processes, their configuration, the issues they raise, their essential content and how they fit into the list of existing means of proof within the judicial process.
