Este trabajo pretende contribuir a destacar a un grupo de mujeres españolas pioneras en el estudio de las ciencias experimentales y su enseñanza, catedráticas de Instituto a partir de 1928, que estuvieron sumidas en un cierto mutismo impuesto por el entorno social de la época, pero que gracias a su esfuerzo y tesón participaron activamente en los foros de innovación, pasando de una situación de exclusión sistemática a ser protagonistas en la investigación científica y en el proceso de renovación de la enseñanza de las ciencias experimentales, contribuyendo en la aplicación y difusión de las nuevas orientaciones.