El calendario electoral argentino comenzó temprano este año con elecciones provinciales y municipales. Pero aún faltan definirse las elecciones de los distritos electorales más importantes en términos de caudal de votos y de peso estratégico. Estas elecciones se advierten cada vez más competitivas y polarizadas.
Y no es que el sistema de partidos argentino se haya fortalecido y configurado dos fuerzas representativas, sino por el contrario, se encuentra fragmentado y débil. Por lo que la oferta electoral se ha configurado en opciones que poco tienen que ver con las pertenencias partidarias, aunque no dejan de tener un fuerte componente ideológico. Esto favorece a los dos candidatos más fuertes a la presidencia.
The Argentine electoral calendar began early this year with provincial and municipal elections. But the elections of the most important electoral districts in terms of votes and strategic weight have to be defined yet . These elections are becoming increasingly competitive and polarized. And it is not that the Argentine party system has been strengthened and configured two representative forces, but on the contrary, it is fragmented and soft. So the electoral offer has been configured in options that have little to do with party belongings, although they do not stop having a strong ideological component. This favors the two strongest candidates for the presidency