Aunque cada vez son más las instituciones internacionales que abogan por la implantación de mecanismos de denuncia por vulneración de derechos fundamentales en procedimientos de deportación, en el ordenamiento español no existe un mecanismo específico en situaciones de detención, internamiento y expulsión de extranjeros siendo los procedimientos administrativos y penales genéricos la única opción. Sin embargo, el derecho a una defensa legal es ineficaz, suspendido o inexistente en varios momentos del proceso sancionador y del control de fronteras. Este artículo discutirá los principales conflictos que afectan básicamente al derecho fundamental a una tutela judicial, concluyendo en señalar la necesidad de habilitar mecanismos de denuncia, e incrementar el celo institucional y judicial para garantizar la efectividad de dicho derecho como condición sine qua non para la denuncia de conculcaciones de derechos. No pueden idearse futuros mecanismos sin ser conscientes de la situación actual, señalar las lagunas normativas, las malas praxis policiales y las vulneraciones de derechos fundamentales existentes.
Although there are more and more international institutions that advocate the implementation of reporting mechanisms for the violation of fundamental rights in deportation proceedings, in the Spanish legal system there is no specific mechanism in situations of detention, incarceration and expulsion of foreigners, with administrative and generic criminal procedures being the only option. However, the right to legal defence is ineffective, suspended or non-existent at various stages of the sanctioning process and border control. This article will discuss the main conflicts that basically affect the fundamental right to judicial protection, concluding by showing the need for enabling reporting mechanisms, and increasing the institutional and judicial zeal for guaranteeing the effectiveness of said right as a sine qua non condition for the reporting of rights violations. Future mechanisms cannot be devised without being aware of the current situation, pointing out normative gaps, police malpractice and violations of existing fundamental rights.