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En el artículo se investiga la experiencia escolar del colegio «Ikastetxea», centro fundado en el año 1896 en Bilbao (País Vasco), y pionero en el uso de la lengua vasca en el aula. Como tantos otros colegios privados que surgieron en la misma época y ciudad, Ikastetxea era un colegio-aula de educación primaria. Su característica más saliente era su currículum vasquista y su modelo de inmersión lingüística en euskera. En aquella época la mayoría de los bilbaínos hablaba castellano (los vascohablantes no suponían más que el 20-25% de la población de la ciudad). Además, la lengua vasca no era oficial y estaba prácticamente excluida del sistema escolar. En ese contexto, la creación de una escuela vascófona en Bilbao resulta llamativa y respondía más a motivaciones ideológicas que a necesidades utilitarias. Ikastetxea fue fundado por Resurrección María de Azkue (1864-1951), intelectual y estudioso de la lengua vasca, y contó con el patrocinio económico y político de Ramón de la Sota y Llano (1857-1936), próspero empresario y líder de la Sociedad Euskalerria. El fervor nacionalista del momento posibilitó que parte de la burguesía bilbaína, de lengua mayoritariamente castellana, apoyara el proyecto. El resultado, sin embargo, fue irregular, en parte por haberse marcado objetivos demasiado ambiciosos y no logró consolidarse.
