La creciente incapacidad económica que presentan los Estados de la región latinoamericana para financiar las universidades públicas, ha posicionado el financiamiento público como un tema común en casi todas las reformas dirigidas a la educación superior. La insuficiencia de recursos públicos está comprometiendo la efectividad de la gestión académica en las universidades públicas, sin que aún se conozcan los asuntos económicos claves para el fortalecimiento de las políticas públicas del sector. Este ensayo tiene como propósito: proponer un nuevo sistema de criterios para la financiación de la educación superior; partiendo del análisis de la experiencia venezolana en materia de las asignaciones de los recursos públicos empleados para el financiamiento de las instituciones de educación superior durante el periodo 2000-2015. Es una investigación de carácter documental. La propuesta contiene siete (7) elementos integradores que darían lugar al establecimiento de una política de financiamiento para la educación superior. Finalmente, se sugiere que el Estado supere los viejos esquemas de presupuesto negociado “incremental”, las fórmulas de financiación “rígidas” y las asignaciones diferidas, que no logran identificar las necesidades y costes básicos para ser asociados a la gestión académica de las instituciones de educación superior, en función de promover la eficiencia, equidad y descentralización en el financiamiento público destinado al sistema de educación superior venezolano.