Málaga, España
El presente artículo tiene como objetivo recuperar una serie de actrices, ídolos de la etapa del cine mudo, que no lograron mantenerse al iniciarse el proceso al hablado.
Ponemos el objetivo en algunas de las actrices más representativas a quienes el progreso técnico iba a condenar al ostracismo al no adecuarse su voz (aún sin la muleta del doblaje) a los inevitables cambios estructurales y auditivos. En los años en que se produce esta transición (último tercio de 1920 y primeros años de 1930) se produjo un general “pánico” entre el colectivo, justificado por cierto, pues a partir de entonces fueron de estricta obligación las “pruebas de voz”, por lo que buena parte de estas glorias mudas vieron frustradas sus carreras. Ídolos con pies de barro, juguetes a merced del marketing y de la voracidad de los productores, sus nombres fueron difuminándose, tan rápido como habían sido encumbrados, en una involuntaria huida plagada de fracasos, de adiciones y de varios casos de suicidios.
This article aims to look back on a series of actresses, idols of the silent film period that did not manage to endure when the process towards the sound films started. We direct the lens towards some of the most representative actresses that were ostracized by the technical progress because their voice (without the support of the dubbing yet) did not adjust to the inevitable structural and aural changes. During the years of this transition (the last third of the 1920s and the first years of the 1930s) a general ‘panic’ spread among the group, panic that was justified as ‘voice tests’ became strictly mandatory ever since, so most of these silent celebrities’ careers were frustrated. Idols with feet of clay, toys at the mercy of marketing strategies and producers’ greed, their names faded away as fast as they were upraised, in an involuntary escape riddled with failures, addictions and several cases of suicides.