Los bancos de alimentos son organizaciones sin ánimo de lucro basadas en voluntariado cuyo objetivo es recuperar y redistribuir excedentes alimenticios entre las personas necesitadas a través de otras entidades. Este estudio se centra en las relaciones de un banco de alimentos con sus organizaciones beneficiarias, que se clasifican en entidades de consumo y entidades de reparto. El trabajo asume una estructura metodológica híbrida cuantitativa-cualitativa, con una primera fase, de carácter exploratorio mediante una encuesta dirigida a todas esas entidades, y una segunda, consistente en un taller participativo para devolución, contraste y profundización de los datos recogidos en la anterior. Los resultados muestran las diferencias entre ambos tipos de entidades en el actual marco de crisis socioeconómica, y sus problemas comunes que se resumen en las dificultades para satisfacer la demanda cuando es muy heterogénea y creciente, y cuando la oferta sigue reglas independientes.