Iciar Cordero Cutillas, Patricia Escribano Tortajada, Luis Martínez Vázquez de Castro
Como todos sabemos el Espacio Europeo de Educación Superior ha supuesto un cambio radical en la impartición de la docencia universitaria, así como del aprendizaje de los alumnos. A estas alturas el profesor universitario ha asumido que las clases teóricas no son el centro o el pilar único del proceso de enseñanza-aprendizaje. Las clases prácticas son un elemento esencial para el aprendizaje del estudiante, sin embargo, en Derecho, siempre se ha seguido el mismo esquema, es decir, plantear al estudiante un c onflicto jurídico que ha de detectar para proceder a buscar la norma correspondiente y aplicar la consecuencia jurídica prevista para tal efecto. Si se quiere ir un paso más allá, se le puede pedir que busque jurisprudencia y doctrina sobre el tema. No obs tante, consideramos que pueden realizarse otro tipo de actividades prácticas diferentes a las descritas, y consideramos que el Cine puede ser una herramienta idónea para este propósito. El objetivo de estas líneas es explicar las ventajas e inconvenientes que puede tener el Cine en la enseñanza práctica del Derecho y explicar una experiencia realizada a cabo en la asignatura Derecho de Familia y Sucesiones del Grado y la Licenciatura de Derecho, en la Universitat Jaume I, por el equipo docente de la misma, llevada a cabo gracias a la Unitat de Suport Educatiu de esta misma Universidad que financió el proyecto