Con fecha de 5 de junio de 2013 se ha publicado en el Boletín Oficial del Estado la Ley 4/2013, de 4 de junio, de medidas de flexibilización y fomento del mercado del alquiler de viviendas cuyo objetivo fundamental es impulsar el cambio desde tradición de compra de viviendas, instaurada en España desde hace décadas, hacia una «cultura del alquiler» al estilo del resto de los países europeos. Para ello se han modificado algunos artículos de la Ley de Arrendamientos Urbanos y de la Ley de Enjuiciamiento civil buscando el equilibrio entre la necesidad de vivienda de los inquilinos y las garantías que necesariamente deben ofrecerse a los arrendadores para su puesta a disposición.