La primera gran crisis de la globalización ha sumido a las economías del mundo en un estado de incertidumbre que requiere la adopción de decisiones eficaces para hacer frente a la misma. Lógicamente, la Unión Europea como interlocutor político en la arena mundial no puede permanecer ajena a esta situación. En el actual debate entre gobernanza global-gobierno de la globalización, las instituciones europeas han hecho valer el paradigma jurídico-político y su correspondiente modelo económico, sobre el que se construye el proyecto de integración. El Estado-mercado y su correlato de actuación económica, el Estado regulador, han estado muy presentes en los ejes de actuación propuestos por la Comisión para el establecimiento de una gobernanza económica global sólida frente a la crisis, en las Cumbres del G-20 celebradas en el 2010. Principios de actuación que también han dejado sentir sus efectos en el propio espacio europeo a través de la propuesta de reforma del Pacto de Estabilidad y Crecimiento.
The first major crisis of globalization has left economies around the world in a state of uncertainty that requires the adoption of effective decisions to address it. Logically, the European Union as a political actor in the international arena cannot remain indifferent to this situation. In the current debate between global governance-the government of globalization, European institutions have made use of the legal-political paradigm and its corresponding economic model on which to build the integration project. The Market State and its correlation with economic performance, the Regulatory State, have been at the lines of action proposed by the Commission for the establishment of a strong global economic governance facing the crisis in the G-20 Summit of held in 2010. Lines of action that have also left their toll on the European space over the proposed reform of the Stability and Growth Pact.