En la Región murciana se ha desarrollado en las últimas décadas un innovador polo de producción de frutas y hortalizas en fresco de vocación plenamente exportadora. En este artículo se analizan las estrategias de racionalización que se han desplegado en ese sistema productivo en la búsqueda de una producción precisa, predecible y eficiente. Para ello se han puesto en marcha toda una serie de innovaciones que buscan la desestacionalización del producto, la integración de tiempos, la búsqueda de diferenciación y calidad, etc. Posteriormente se estudian los mercados de trabajo locales, atendiendo a los cambios experimentados conforme la racionalización se ha ido consolidando. Finalmente, todos estos elementos se ordenan en el interior de una específica configuración social, en la cual se define, una nueva composición social del trabajo jornalero (mujeres e inmigrantes) que explica el alcance de la racionalización productiva en relación a las posibilidades de gestión de las incertidumbres del trabajo.