Manuel Madrid Delgado
El acuerdo alcanzado sobre el Estatuto catalán deja tres facturas sobre la mesa. El PSOE deberá pagar una factura política por este acuerdo, al visualizarse las presiones nacionalistas para llevar a buen puerto el Estatuto. El sistema político también paga una factura que tiene que ver con una concepción del Estado que otorga fuerza añadida a los nacionalismos periféricos. Y por último, el pacto hará pagar una factura considerable al Estado de Bienestar español a largo plazo, al variar los criterios de redistribución de la riqueza que hasta ahora eran competencia del Estado.