Temuco, Chile
Provincia de Talca, Chile
A nivel mundial, los profesores enfrentan numerosos desafíos en su desarrollo profesional. Sin embargo, no utilizan fuentes científicas debido a obstáculos como el acceso, la interpretación y la aplicación práctica del conocimiento científico. El objetivo de este estudio es identificar las fuentes de información no escrita y los criterios de validación empleados por educadoras de preescolar para seleccionar dichas fuentes en el marco de su desempeño profesional. Participaron 12 educadoras de preescolar, utilizando un enfoque metodológico cualitativo para recoger datos a través de grupos focales y entrevistas semiestructuradas. Los hallazgos demuestran que las educadoras valoran significativamente las contribuciones de otros profesionales y las familias activamente involucradas en la educación de sus hijos, debido a la inmediatez y relevancia práctica de dicha información. Estas fuentes no escritas son preferidas sobre las científicas, que a menudo se perciben como menos accesibles y aplicables al contexto educativo. El estudio subraya la necesidad de reconocer y valorar el conocimiento empírico y las colaboraciones interpersonales en educación. Enfatiza en el desarrollo de estrategias que integren de manera efectiva la evidencia científica en las prácticas de enseñanza, superando las barreras existentes y promoviendo una práctica basada en la evidencia que sea accesible y relevante para las educadoras.
Teachers worldwide face numerous challenges in their professional development. However, they often do not use scientific sources due to obstacles such as access, interpretation, and practical application of scientific knowledge. This study aims to identify non-written sources of information and the validation criteria employed by preschool educators in selecting these sources within the framework of their professional performance. Twelve preschool educators participated in the study, which utilized a qualitative methodological approach to collect data through focus groups and semi-structured interviews. The findings demonstrate that educators significantly value the contributions of other professionals and actively involved families in their children’s education, due to the immediacy and practical relevance of this information. These non-written sources are preferred over scientific ones, which are often perceived as less accessible and applicable to the educational context. The study highlights the need to recognize and value empirical knowledge and interpersonal collaborations in education. It emphasizes the development of strategies that effectively integrate scientific evidence into teaching practices, overcoming existing barriers and promoting evidence-based practice that is accessible and relevant to educators.