En este artículo, los autores presentan la teoría de que en la región asiática existe una estrecha interelación entre la política de relaciones industriales y las estrategias de industrialización que se adoptan por razones de desarrollo económico. Utilizando ejemplos de diversos países, los autores demuestran que la estrategia de desarrollo choca con la política nacional de relaciones industriales así como con las prácticas de relaciones laborales que se siguen en el lugar de trabajo, señalando cierto grado de convergencia. Sin embargo, también señalan que los acuerdos institucionales específicos que los países adoptan a fin de cumplir los objetivos de relaciones industriales varían considerablemente. También identifican los diversos modelos que han sido seguidos por diferentes países.
Más tarde, el articulo perfila las principales tendencias en las relaciones industriales de Asia a lo largo de la pasada década, en términos de descenso de afiliación sindical, descentralización, indemnizaciones, seguridad en trabajo, conflictividad laboral, y otros indicadores de relaciones industriales. La sección final debate las emergentes tendencias globales y las realidades de los países de la región, las lecciones que se han aprendido de la experiencia asiática y argumenta que la tarea de las relaciones industriales de cara al siglo XXI es la de adoptar objetivos de estabilidad y flexibilidad, así como de eficacia y equidad para poder satisface intereses de las partes implicadas en las relaciones laborales. En particular, los autores sugieren que este principio es la única recomendación que pueden ofrecer, dado que los países desarrollarán sus propias instituciones y disposiciones conforme a su propia cultura y a su pasada historia institucional.