Tarapoto, Perú
Argentina
En este artículo recuperamos procesos de investigación con niñxs de la organización “Rebeldes de Cárcova” en Buenos Aires, desde el equipo “Infancias, juventudes y familias: Transformaciones sociales, crisis del cuidado y proyectos de futuro en escenarios pos-pandemia”. En este marco, desarrollamos talleres colaborativos sobre sus perspectivas y experiencias de cuidado.
Ahora nos enfocamos en nuestras interacciones con lxs niñxs, examinando notas etnográficas y abordando diferentes perspectivas que discuten el protagonismo infantil y proponen des-centrar la infancia para analizar múltiples condicionamientos y el carácter relacional del conocimiento.
Entre los hallazgos destacamos que los acuerdos y negociaciones intergeneracionales, configuraron sentidos particulares de participación y cuidado. Estas dinámicas, lejos de ser predefinidas, surgieron del derrotero metodológico, ético y político del proyecto.
Desde una aproximación afectiva a las estrategias metodológicas, señalamos que las emociones y vínculos constituyen recursos interpretativos clave, aportando a los debates sobre la co-construcción del saber en los estudios sociales.
In this article we recover research processes with children from the organization “Rebeldes de Carcova” in Buenos Aires, from the team “Children, youth and families: Social transformations, care crisis and future projects in post-pandemic scenarios”. In this framework, we developed collaborative workshops on their perspectives and experiences of care.
Now we focus on our interactions with children, examining ethnographic notes and addressing different perspectives that discuss children’s protagonism and propose de-centering childhood to analyze multiple conditions and the relational nature of knowledge.
Among the findings, we highlight that intergenerational agreements and negotiations configured particular senses of participation and care. These dynamics, far from being predefined, emerged from the methodological, ethical and political course of the project.
From an affective approach to methodological strategies, we point out that emotions and links constitute key interpretive resources, contributing to debates on the co-construction of knowledge in social studies.