El presente artículo comienza con una perspectiva global introductoria, para pasar a otra nacional, más minuciosa sobre las desigualdades regionales en España. De los datos disponibles más recientes se deduce que si hace dos décadas la "distancia" entre los países con más alta renta del mundo y los más pobres era de 1 a 42, en 2002 había aumentado mucho, pasando a ser incluso de 1 a 107 en el caso de los subsaharianos. No existe indicio alguno de convergencia entre los dos extremos del ranking mundial, sino al contrario. En el caso de España, a lo largo de las dos últimas décadas se mantienen en cabeza prácticamente las mismas provincias (sitas en el norte y este del país, además de Madrid), pero han disminuido las diferencias de renta entre los españoles en ese mismo periodo. No obstante, resulta también que las provincias más pobres son las que muestran mayor desigualdad interior. Son las seis andaluzas, las dos extremeñas, más Ciudad Real y Albacete.