En Cataluña, en los últimos años, ha ido proliferando una serie de "profesionales" que realizan, con más o menos adecuación a la definición teórica de mediador intercultural, dicha función. Concretamente, los mediadores interculturales intervienen en cuestiones como la participación de los padres de origen minoritario en los centros escolares; la adaptación del vitae a la diversidad cultural; la negociación de conflictos "culturales" (la carne de cerdo en el comedor escolar, el uso del pañuelo...); la desescolarización; absentismo y abandono escolar de los alumnos durante el período de la escolarización obligatoria; la traducción lingüística y la interpretación sociocultural, etc. La experiencia adquirida nos indica de forma clara cuáles son los problemas que se producen con más frecuencia y las vías de solución que han resultado más eficaces.