En este artículo se pretende iniciar un abordaje sobre la sensibilidad desde el enfoque sapiencial, que enfatiza la relación existente entre la sensibilidad con el ámbito de la espiritualidad y, por otra parte, sugiere la tarea de redefinir la cualidad de la sensibilidad en cuanto resulta ser un elemento indispensable para la consecución de la “vida buena”. Desde este contexto, el artículo continúa matizando algunos obstáculos que dificultan el “despertar” de la sensibilidad humana y, por último, proporciona algunas indicaciones para cultivar la sensibilidad.