El 6 de febrero de 2024, la Comisión propuso una refundición de la Directiva 2011/93/UE con el objeto de fortalecer la legislación penal sobre abuso sexual infantil y explotación sexual. Las normas revisadas amplían las definiciones de delitos, introduciendo penas más altas y requisitos más específicos de prevención y asistencia a las víctimas. Son complementarios de la propuesta de Reglamento que la Comisión propuso en 2022, que establece obligaciones para que las empresas de Internet detecten, informen y eliminen material de abuso sexual infantil en sus servicios.