Carlos Peña González
El autor analiza —intentando responder a la pregunta que encabeza su ensayo— cómo los fundamentos para la filosofía moral elabora-dos por Kant son requeridos para defender ideas y convicciones político-sociales que son indispensables en una sociedad democrática, a saber, la idea de las libertades públicas, en tanto límites insalvables al poder; la tolerancia y el pluralismo como condiciones de la democracia; y, en fin, un concepto de persona que considera fines en sí mismos, e intangibles como tales, a todos los seres humanos por igual. Esta tesis, que concibe la moralidad de manera procedimental, universalista y autónoma, proporcionaría, sostiene Carlos Peña, una defensa fuerte, y basada en razones, de las convicciones morales y políticas que subyacen al liberalismo. Todo ello en oposición a un liberalismo escéptico que concibe la democracia como un resultado de una insalvable incertidumbre moral.