Aunque algunos analistas suelen resumir los problemas de Yemen en tres palabras: armas, qat y basura, lo cierto es que el subdesarrollo de Yemen, especialmente llamativo por encontrarse este país en un área geográfica próspera y estable como la península arábiga, tiene sus raíces en décadas de aislamiento y un pasado reciente de una inestabilidad difícil de exagerar.
Este artículo refleja la reciente evolución política y económica y las perspectivas de desarrollo que presenta este país en el que prácticamente todo está por hacer. También se analizan las relaciones comerciales hispano-yemeníes y se apuntan los sectores más atractivos para la introducción de empresas españolas a través de concursos y proyectos con financiación internacional o multilateral.