Seudónimo Ocelote
De acuerdo con la prueba PISA, en México 35% de los estudiantes no dispone de un nivel mínimo de competencia en las áreas de matemáticas, lectura y ciencias. Actualmente, en el campo de la neuropsicología se ha identificado que la mayoría de las dificultades en el aprendizaje escolar son provocadas por cuatro trastornos del neurodesarrollo: discapacidad intelectual, TDAH (en su presentación predominantemente Inatento), trastorno del lenguaje y trastorno específico del aprendizaje, que en conjunto causan que aproximadamente 19% de niños/as tengan bajo rendimiento escolar. Por desgracia, en el sistema educativo nacional no se ha implantado un tamizaje que detecte oportunamente las causas (trastornos) que producen las deficiencias en el aprovechamiento escolar. En cambio, socialmente se culpa a la pobreza, a la práctica docente o a las autoridades educativas de las deficientes calificaciones obtenidas por las niñas y niños en las mediciones nacionales o internacionales que evalúan la efectividad del sistema educativo nacional. Este trabajo propone una metodología diseñada para la aplicación de procesos de tamizaje universal dentro del sistema educativo nacional, dirigido a la identificación de cuatro trastornos del neurodesarrollo que originan la mayor cantidad de problemas de aprendizaje. Por tal motivo, se toma como referente conceptual a la Psicología Basada en Evidencia (PBE), la cual consiste en reunir la mejor evidencia científica que avale una intervención clínica específica. La carencia del tamizaje, por lo contrario, respalda que erróneamente la discusión en torno a la educación en México se centre en factores sociales o políticos, en lugar de enfocarse en la atención pertinente de las deficiencias surgidas por afecciones del neurodesarrollo entre las niñas y niños mexicanos. A raíz del tamizaje, en el ámbito escolar se diseñarán intervenciones psicopedagógicas objetivas, mientras que en lo relativo a la gestión pública y legislativa se generarán insumos que faciliten el diseño de políticas públicas que efectivamente impacten en la calidad de la educación nacional. En conclusión, la falta de un tamizaje universal agrava las diferencias suscitadas por situaciones socioeconómicas, ya que no se detectan oportunamente los trastornos del neurodesarrollo que perjudican el rendimiento escolar de las niñas y niños de escasos recursos, por lo que continuarán con menor aprovechamiento académico y mayor deserción, con lo que se niega el derecho a la educación, pues no hay forma de ejercer realmente este derecho si las deficiencias neuropsicológicas causadas por un trastorno del neurodesarrollo impiden el aprendizaje efectivo