Carlos Ángel Benavides Velasco , Cristina Quintana García
Aunque tradicionalmente la cooperación entre competidores ha sido considerada como un foco de relaciones conflictivas, hoy en día, el éxito empresarial requiere la integración de las perspectivas de cooperación y competición (co-opetición). Determinadas empresas (especialmente de alta tecnología) co-opiten dada la complejidad de los procesos de innovación, y la distribución de los recursos y capacidades necesarios entre diversos agentes generadores de conocimiento. Existen pocos estudios empíricos que analicen la estrategia co-opetitiva. En este trabajo revisamos los enfoques teóricos desde los que se puede abordar la misma y se identifican distintos comportamientos alternativos que emergen de la combinación de las orientaciones de cooperación y competición. Finalmente, mostramos los resultados de un estudio empírico realizado sobre una muestra de empresas europeas biotecnológicas, donde se ha contrastado el impacto de la estrategia de co-opetición en el rendimiento medido en términos de capacidad de innovación.