Ubicado en un predio de pendiente moderada, el Parque Prado centro moldea suavemente la geografía generando sucesiones de terrazas donde se vinculan poblaciones vegetales, animales y humanas en torno a la reutilización de materiales, la implementación de técnicas constructivas vernaculares y la generación de permeabilidad del suelo para la infiltración y utilización de agua de escorrentía.
El proyecto es una metáfora de lo que surge, deviene y crece de forma natural, se fundamenta en la naturalización de la acción cultural como principio vital en el futuro de la ciudad.
El proyecto interpreta por primera vez en la ciudad políticas urbanas de construcción sostenible a través de tres acciones específicas.
+ No demoler, sino desmontar el material existente en el propio predio con el propósito de reorganizar, reagrupar y reutilizar en diferentes procesos para la construcción del nuevo parque dándole un nuevo significado al material. Disminuyendo la presión de residuos en rellenos sanitarios y minimizando la demanda de nuevos insumos.
+ Cambio del modelo de manejo de aguas de escorrentía en la ciudad por retención e infiltración del agua en los jardines aprovechándola para el riego, fortaleciendo la tasa de crecimiento de la vegetación seleccionada y su permanencia en el tiempo.
+ Rescate de tradiciones constructivas vernaculares y utilización recursiva de materiales de segunda generación buscando acercar la obra pública como ejemplo constructivo para la población.