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Maritza Choque Quispe, Maila Mikol Mamani Arriola, Karla Rivera Valdivia
El consumo de alimentos adecuado y equilibrado, y la actividad física constante son indispensables para mantener una buena salud. Sin embargo, los adolescentes en edad escolar demuestran una conducta contraria en su alimentación y su rutina física, lo que podría causarles problemas para su salud como el sobrepeso. Por ello, el objetivo de la presente investigación es determinar la relación entre el consumo de alimentos procesados y ultraprocesados, y la actividad física en adolescentes de una institución educativa privada. La investigación es de tipo básica, con enfoque cuantitativo, de diseño no experimental y correlacional. La muestra del estudio estuvo conformada por 102 estudiantes (varones 46.1 % y mujeres 53.9 %) del 3.º, 4.º y 5.º grados. Se utilizaron el Cuestionario de frecuencia de ingesta de alimentos para la primera variable y el Cuestionario de actividad física en adolescentes PAQ-A para la segunda. Los resultados revelan que el 75.5 % de adolescentes tiene un consumo mensual de 1-3 veces de alimentos procesados y ultraprocesados; asimismo, el 48 % de los estudiantes tiene actividad física entre baja y muy baja. Se concluye que la relación entre el consumo de alimentos procesados y ultraprocesados, y la actividad física es inversa (Rho de Spearman: -0,356), ya que los adolescentes con un mayor consumo de alimentos procesados y ultraprocesados manifiestan menor actividad física.
The consumption of adequate and balanced food, and constant physical activity are essential to maintain good health. However, adolescents of school age show contrary behavior in their eating and physical routine, which could cause health problems such as being overweight. Therefore, the aims of this research is to determine the relationship between the consumption of processed and ultraprocessed foods, and physical activity in adolescents from a private educational institution. The research is of a basic type, with a quantitative approach, of a non-experimental and correlational design. The study sample consisted of 102 students (46.1% male and 53.9% female) from the 3rd, 4th and 5th grades. The Food Intake Frequency Questionnaire was used for the first variable and the PAQ-A Adolescent Physical Activity Questionnaire for the second. The results reveal that 75.5% of adolescents have a monthly consumption of 1-3 times of processed and ultra-processed foods; likewise, 48% of students have physical activity between low and very low. It is concluded that the relationship between the consumption of processed and ultraprocessed foods and physical activity is inverse (Spearman's Rho: -0.356), since adolescents with a higher consumption of processed and ultra-processed foods show less physical activity.
