La nueva tasa del Ayuntamiento de Barcelona que, desde el 1 de marzo de 2023, se exige por el aprovechamiento especial del dominio público que realizan las empresas que actúan en el mercado como operadores postales, a través de vehículos que utilizan las calles y vías públicas como plataforma para la distribución de los bienes adquiridos mediante el comercio electrónico a los destinos finales indicados por los consumidores, surge envuelta en polémica. En este trabajo analizamos su proceso de elaboración y sus elementos esenciales poniendo el foco en algunos problemas que debieran resolverse antes de que otros Consistorios sigan el mismo camino, o que a nivel estatal o autonómico se implante un tributo de similares características.
The new tax of the Barcelona City Council that, from March 1, 2023, is required for the special use of the public domain by companies that act in the market as postal operators, for the distribution of goods purchased through electronic commerce to the final destinations indicated by consumers, it arises involved in controversy. In this paper we analyze its production process and its essential elements, focusing on some problems that should be resolved before other town halls follow the same path, or that a tax with similar characteristics is implemented at the State or Regional level.