El periodista Patrick Remacle y su colega Thierry Luthers se han pasado dos años y medio investigando las derivas del fútbol belga. Decenas de personas aceptaron testificar, a menudo de forma anónima, rompiendo la ley del silencio que suele ser la regla en estos ámbitos. Los dos periodistas tuvieron acceso a importantes documentos confidenciales, en particular las audiencias del primer arrepentido de la historia judicial belga, Dejan Veljkovic, representante de jugadores.