En las actuales sociedades europeas envejecidas, los comportamientos residenciales de las personas de edad están adquiriendo una importancia creciente. En este artículo se exploran las relaciones causales entre la biografía migratoria previa y las pautas residenciales adoptadas tras los 55 años, usando Event History Analysis. Los resultados demuestran que el lugar de nacimiento marca la trayectoria migratoria posterior de los individuos, llegando a afectar incluso al comportamiento residencial en la vejez. La existencia de migraciones previas, el hábitat de residencia, así como la duración del periodo sedentario, ejercen también una importante influencia sobre la decisión de movilidad en la vejez. Finalmente, se demuestra que la reducción de la movilidad entre las generaciones de mayores más recientes es un efecto de su biografía migratoria previa. Las trayectorias migratorias protagonizadas por los individuos a lo largo de su vida, joven y adulta, se revelan más decisivas respecto a los comportamientos residenciales en la vejez que las circunstancias coyunturales. Por ello, posibles cambios en las biografías migratorias de las generaciones más jóvenes podrían traducirse en cambios en los niveles de movilidad en la vejez, independientemente de las circunstancias coyunturales. A este respecto se pueden observar diferencias por género, mostrándose las mujeres más vulnerables frente a las circunstancias históricas que los hombres.