El concepto de «autonomía estratégica» incorpora la idea política de «independencia» y la noción jurídica de «soberanía». Ya que la UE depende para la energía en gran medida de recursos extranjeros, en particular de regímenes autocráticos, las situaciones de gobernanza difíciles, en particular las guerras, pueden perturbar profundamente el suministro energético de la Unión. Concretamente, la guerra en Ucrania se ha explicado de forma convincente como una afirmación del desarrollo opuesto de la «esfera de influencia» de Rusia, en la que el suministro de energía se utiliza como un «arma» para crear dependencia más allá de las fronteras de los Estados soberanos. Mientras que la doctrina académica ha propuesto una dicotomía para que la UE y sus Estados miembros escapen de la esfera de influencia de Rusia, ya sea diversificando las fuentes de energía o acelerando la transición verde, en este artículo se argumenta que los dos enfoques deben considerarse complementarios en lugar de alternativos. Por lo tanto, se sugiere que, al menos a corto plazo, la UE y sus Estados miembros busquen diversificar sus fuentes de energía, mientras que al mismo tiempo intenten acelerar la transición del Pacto Verde como una estrategia a más largo plazo. Considerando que la UE y sus Estados miembros deberían calificarse como «no beligerantes» con respecto a Rusia, el estado de necesidad parece la justificación jurídica más adecuada para renunciar a las obligaciones de suministro de energía ya contraídas y pasar a una política energética diversamente equilibrada.
Recibido: 26 octubre 2022Aceptado: 27 enero 2023
The concept of “strategic autonomy” embeds the political idea of “independence” and the legal notion of “sovereignty”. As the EU largely depends for energy on foreign resources, particularly from autocratic regimes, difficult governance situations, notably wars, can deeply disrupt the Union’s energy supply. Specifically, war in Ukraine has been convincingly explained as an affirmation of the opposed development of Russia’s “sphere of influence”, whereby energy supply is used as a “weapon” to create dependency across sovereign State borders. Whereas scholars have advanced a dichotomy for the EU and its Member States to escape Russia’s sphere of influence, either diversifying energy sources or accelerating the green transition, it is argued in this paper that the two approaches should be considered complementary rather than alternative. It is therefore suggested that, at least in the short term, the EU and its Member States should seek to diversify their energy sources, whilst at the same time trying to accelerate the green transition under the Green Deal as a longer-term strategy. As the EU and its Member States should qualify as “non-belligerent” vis-à-vis Russia, necessity seems the most suitable legal justification to relinquish already contracted energy supply obligations and move to a newly balanced energy policy.
Received: 26 October 2022Accepted: 27 January 2023