Víctor Manuel Pérez Martínez
El artículo nos ofrece una semblanza del padre Julián García, dominico que vivió en Venezuela por muchos años. En 1956 se residencia definitivamente en el país y desde esa fecha se orienta hacia el trabajo pastoral desde el mundo de las comunicaciones. Nos deja una herencia rica en textos, experiencias y anécdotas. Quizás su trabajo más resaltante y significativo haya sido un material audiovisual de gran valor sobre la historia de la Orden de los dominicos en América Latina. Sirva este breve texto para recordarlo.