Ricardo Jacob Mendoza Rivera, Francisco Venegas Martínez
El objetivo de este trabajo es evaluar el impacto de la pandemia COVID-19, medida a través del índice de fatalidad, en los precios de la gasolina y el gas natural en las principales economías en Latinoamérica: Brasil, México, Colombia, Perú, Chile y Uruguay. Estas economías no sólo son las más grandes de la región, sino también las más afectadas por la pandemia de COVID-19. Asimismo, estos países han mostrado, en las últimas décadas, una demanda ascendente de gasolina y gas natural. Esta investigación utiliza diversos modelos de datos panel con datos semanales (febrero 2020–febrero 2021). Los modelos de datos panel de efectos aleatorios a dos vías sugieren evidencia empírica de que las tasas de crecimiento de los índices de fatalidad, para todos los países en la muestra, tienen efectos negativos únicamente en las tasas de crecimiento de los precios de gasolina; sin ningún efecto en el precio del gas. En esta investigación, el tipo de cambio es utilizado como variable de control por su relación con los precios de los hidrocarburos. Los datos empleados en el análisis son oficiales sin considerar el exceso de mortalidad por la causa específica del COVID-19. Este tipo de análisis en Latinoamérica, hasta donde los autores saben, es novedoso y contribuye a la discusión de coyuntura entre la crisis de salud y su relación con la volatilidad de los precios de los energéticos.
This paper is aimed at evaluating the impact of the COVID-19 pandemic, measured through the fatality index, on the gasoline and natural gas prices in the main Latin American economies: Brazil, Mexico, Colombia, Peru, Chile and Uruguay. These economies are not only the largest in the region, but also the most affected by the COVID-19 pandemic. Likewise, these countries have shown, in the last decades, a growing demand for gasoline and natural gas. This research uses several panel data models with weekly data (February 2020 - February 2021). Two-way random-effects panel data models suggest empirical evidence that mortality rate growth rates, for all sample countries, have negative effects only on gasoline price growth rates; without any effect on the price of gas. In this research, the exchange rate is used as a control variable due to its relationship with hydrocarbon prices. Data used in the analysis are official without considering the mortality excess by specific cause of COVID-19. This type of analysis in Latin America, as far as the authors know, is novel and contributes to the discussion of the conjuncture between the health crisis and its relationship with volatility of energy prices