Yolanda Cano Galán
No procede reconocer el permiso por paternidad al padre del hijo nacido muerto a las 39 semanas y 3 días de gestación, por cuanto la finalidad del permiso por maternidad y paternidad es distinta: 1) El permiso por maternidad tiene por finalidad garantizar la salud de la madre biológica; y 2) El permiso por paternidad tiene por finalidad garantizar la conciliación de la vida personal, laboral y familiar, sin que subsista, en el caso de nacimiento de un hijo muerto, la necesidad de conciliación. La medida no supone discriminación por razón de sexo.