Los límites de estatura mínima establecidos diferenciadamente para hombres y mujeres afectan de manera mucho más intensa a las mujeres que a los hombres, además de que en el proceso selectivo existen pruebas físicas y médicas que garantizan por sí solas la idoneidad física y médica para el desarrollo de las funciones atribuidas a la Policía, incluso existen áreas funcionales que ni tan siquiera necesitan para su adecuado desempeño ninguna condición física especial, y mucho menos tener una estatura concreta.