Dionisio Fernández de Gatta Sánchez
La pandemia del COVID-19 trajo consigo en España la declaración de tres estados de alarma (en marzo y octubre de 2020) y la adopción de otras medidas con problemas jurídico-constitucionales y administrativos. Asimismo, se asignaron a Jueces y Tribunales unos poderes cuasi-normativos y administrativos en relación con la ratificación y autorización de las medidas sanitarias de lucha contra el coronavirus, que asimismo han generado otros problemas. El Tribunal Constitucional declaró en 2021 inconstitucionales el primero y el tercero de los estados de alarma y el cierre del Congreso de los Diputados, y, más recientemente, la STC de 2 de junio de 2022 también ha declarado la inconstitucionalidad de las medidas de intervención judicial. Y todo ello sin tener una legislación apropiada para luchar contra el COVID-19, y ello en pleno ascenso de la que será la séptima ola de la epidemia en España.
The COVID-19 pandemic brought with it in Spain the declaration of three states of alarm (in March and October 2020) and the adoption of other measures with legal-constitutional and administrative problems. Likewise, Judges and Courts were assigned quasi-normative and administrative powers in relation to the ratification and authorization of health measures to combat the coronavirus, which have also generated other problems. The Constitutional Court declared in 2021 unconstitutional the first and third of the states of alarm and the closure of the Congress of Deputies, and, more recently, the Judgment of the Constitutional Court of June 2, 2022 has also declared the unconstitutionality of the measures of judicial intervention. And all this without having appropriate legislation to fight against COVID-19, and this in full ascent of what will be the seventh wave of the epidemic in Spain.