Alejandra Selma Penalva
El derecho a la desconexión digital se plantea en la sociedad profundamente digitalizada que caracteriza al Siglo XXI como una de las nuevas facetas del derecho al descanso de las personas trabajadoras. A pesar de que se trata de un derecho reconocido directamente por el legislador (aunque en términos bastante imprecisos y generales), son los acuerdos con los propios trabajadores los que ayudarían a perfilar su concreto alcance y a evitar gran parte de los conflictos prácticos que este tema va a suscitar en la práctica. Pese a todo, todavía la negociación colectiva de nuestro país no le ha conferido a este tema la importancia que merece. Y es que no se puede olvidar que, para que este derecho sea plenamente efectivo, todos los sujetos implicados (empresario y trabajadores de la empresa, sea cual sea su nivel, categoría y puesto de trabajo), deben comprometerse a respetarlo. En estas líneas se proponen ciertas ideas que podrían resultar eficaces para aquellas empresas que quieran elaborar un protocolo de actuación que ayude a todos los sujetos implicados no solo a disfrutar eficazmente de su derecho a la desconexión digital, sino también a respetar el ejercicio del citado derecho por parte del resto de empleados de la empresa.
The right to digital disconnection arises in the deeply digitized society that characterizes the 21st century as one of the new facets of the right to rest for working people. Despite the fact that it is a right recognized directly by the legislator (although in quite imprecise and general terms), it is the agreements with the workers themselves that would help to outline its specific scope and avoid a large part of the practical conflicts that this issue may have. going to raise in practice. However, collective bargaining in our country has not yet given this issue the importance it deserves. And it is not possible to forget that, for this right to be fully effective, all the subjects involved (employer and company workers, whatever their level, category and job position), must undertake to respect it. In these lines, certain ideas are proposed that could be effective for those companies that want to develop an action protocol that helps all the subjects involved not only to effectively enjoy their right to digital disconnection, but also to respect the exercise of said right by the rest of the employees and collaborators of the company