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Santiago García Echevarría 
La economía, tanto como ciencia cómo en la realidad social, es siempre una economía en el marco de una sociedad y en el contexto básico de su “sistema de valores” sobre los que pretende fundamentar tanto los comportamientos de las personas como la configuración de las instituciones. Toda acción económica conlleva siempre consecuencias sociales y societarias que afectan a toda acción de las personas como también de las instituciones. La Doctrina Social de la Iglesia descansa su interpretación en la acción humana y de sus instituciones en torno al “sistema de valores “en el que plantea el cristianismo. Implica su universalidad orientada a la acción de la persona en las más diversas áreas del desarrollo de la misma, su amplia interdisciplinariedad y la afirmación de aquellos valores que deben regir toda acción humana desde la universalidad de la Doctrina Social de la Iglesia. En esta aportación se recoge el contenido de la última Encíclica “Fratelli Tutti” en lo que afecta especialmente a aquellos valores implicados en el contexto económico-social y societario de la persona y se busca la respuesta sobre cómo se debe articular el “Orden Económico-social “para que se logre configurar los procesos económicos-sociales conforme a los “sistemas de valores” que deben regir los comportamientos de las personas, así como la configuración de las instituciones y sus formas organizativas y su gobernanza.
Both as a science and as a social reality, economics is always economics within the social reality and within the basic context of its “values system,” upon which both individual behaviour and institutional configurations aim to establish themselves. All economic action always involves social and societal consequences that affect both the individuals and the institutions implicated. The Roman Catholic Church’s Social Doctrine bases its interpretation upon a values system which contemplates Christianism. This involves its universality oriented towards individual action in the most diverse areas of its development, its wide multiculturalism and the affirmation of those values that must inform all human action from the universal nature of the Roman Catholic Church’s Social Doctrine This contribution considers the latest Encyclical, “Fratelli Tutti” in terms of its effect upon those values contained within the individual’s socio-economic and societal context, seeking a response as to how the Socio-economic must be structured “in order to configure socioeconomic processes according to the values systems” that must inform individual behaviour, as well as the configuration of institutions, their organisational forms, and their governance.
