En México, los cambios políticos surgieron sobre todo en las ciudades don-de convergen los flujos socio-económicos, en los entronques del sistema interurbano de carreteras federales. Muchos de estos polos de desarrollo regional y corredores urbanos / industriales fueron los detonantes de la alternancia en sus respectivas zonas de influencia; se siguió la jerarquía urbana marcada por el sistema interurbano de carreteras. El territorio nacional se fragmentó en un mosaico de unidades subnacionales plurales competitivas que convivían con enclaves autoritarios, cuya marginación de los flujos socioeconómicos de la jerarquía urbana los hizo resistentes a los efectos de democratización.