La migración internacional indocumentada en México enfrenta una grave crisis de derechos humanos. Cada año, cientos de miles de personas migrantes, principalmente de Centroamérica, atraviesan México para llegar a Estados Unidos. Su trayecto está caracterizado por extorsiones, secuestros, tortura, desapariciones y muerte. Para activistas y organismos de la sociedad civil, esta crisis se explica por lo que denominan “securitización” de la política migratoria. Por “securitización” entienden una política impuesta a México por Estados Unidos que ve en los migrantes una amenaza a la seguridad. Este artículo reta esta interpretación. El argumento es que la teoría de la securitización es insuficiente para entender los múltiples factores que hacen posible la violación sistemática de los derechos humanos de los migrantes en tránsito.