Cádiz, España
Colombia
Las portadas de las revistas femeninas de alta gama españolas se constituyen como un sello de identidad, así como una poderosa herramienta de promoción, sustento y divulgación de un prototipo ideal de belleza femenino que restringe la corporalidad de la mujer. Mediante la articulación de tres parámetros concretos – talla ≤ 36, altura ≥ 170 centímetros y un somatotipo ectomorfo–, se difunde un aspecto sobrerrepresentado a partir de atribuciones positivas, que enaltecen la perfección facial y corporal de la mujer, en detrimento de la madurez femenina y de las particularidades psicológicas. Un ideal de belleza abanderado por mujeres que son respetadas y reconocidas, por ser celebridades, principalmente del mundo del espectáculo, y que yuxtaponen sus cualidades asociadas a vidas fáciles. Dicha banalización contrasta con las funciones y roles que, a diario, desarrolla la mujer contemporánea, ya sea en el plano laboral o actitudinal, desaparecen.