Mikel Peña Sarrionandia
En el año 2018 Yorgos Lanthimos recibió diez nominaciones a los premios Oscar gracias a su película The Favourite. Además de eso, el autor también se ha convertido en un habitual en el Festival de Cannes. Estos premios suponen un gran reconocimiento, y más aún cuando hablamos de un director alternativo que proviene de una Grecia sumida en la más profunda crisis económica. El presente trabajo analiza las películas de Lanthimos y reflexiona sobre el retrato que hace el autor del individuo posmoderno. Identifica los rasgos y características comunes que se repiten a lo largo de su filmografía y a partir de su análisis invita a meditar sobre el individuo y el sistema capitalista actual. Entre los resultados, se destaca que en la sociedad contemporánea posmoderna el individuo ha sufrido un fuerte proceso de alienación. La identidad propia ha sido negada y las relaciones románticas han sido convertidas en una fuente de placer inmediata y desechable. El sexo se ha convertido en una mercancía. El lenguaje ha mostrado su inutilidad a la hora de crear lazos afectivos entre personas y de dar sentido a la realidad y se ha convertido en una herramienta con la que los poderosos mantienen a sus súbditos bajo control. Como consecuencia, los individuos no consiguen conectar entre ellos y a falta de un objetivo común se encuentran aislados y solos.
In 2018, Yorgos Lanthimos’ film The Favourite received 10 Oscar nominations. The director also became a regular in Cannes. These awards are a great recognition of Lanthimos' success, and are even more poignant for an alternative filmmaker who started in crisis-hit Greece. This work analyses Lanthimos’ films and deliberates about the portrait the author makes of the post-modern individual. It identifies the common characteristics throughout its filmography and from those observations it invites meditation on the current capitalist system. It argues that in contemporary post-modern society individuals have suffered a strong alienating process in which subjectivity has been denied. Romantic relationships have become an immediate and disposable source of pleasure and sex has become a consumable good. Language has shown its inefficiency in creating emotional ties between people and also in its purpose of making sense of reality and it has become a tool for the powerful to keep their subjects under control. As a consequence, individuals are unable to connect with each other and in the absence of a common goal they find themselves completely isolated and alone.