El artículo intenta establecer el propósito de la teoría de la argumentación para el proceso penal y el derecho probatorio, al mismo tiempo para identificar los límites de la argumentación, la validez y la evidencia. El enfoque principal para el estudio de este problema se aplicó comparativamente correcto, así como métodos formalmente lógicos. Como resultado, solo el sentido común es realmente importante, ya que las ficciones, en cualquier caso, deberían ser inferiores a la evaluación de la evidencia de acuerdo con la convicción interna. En conclusión, son las conexiones lógicas que subyacen a las creencias las que forman la base de los argumentos que justifican la posición misma.
The article attempts to establish the purpose of the theory of argumentation for the criminal process and evidentiary law, at the same time to identify the boundaries of argumentation, validity and evidence.The leading approach to the study of this problem was applied comparatively right, as well as formally logical methods. As a result, only common sense is of real importance, since fictions, in any case, should be inferior to evaluating evidence according to internal conviction. In conclusion, it is the logical connections thatunderlie beliefs that form the basis of the arguments justifying the position itself.