La Unión Europea ha presentado una propuesta de normativa que implica la reducción de las emisiones de automóviles en un 55% para el año 2030, y la obligación de venta de vehículos nuevos exclusivamente de cero emisiones a partir de 2035. Debido al escaso tiempo restante para la consecución de estos objetivos, desde Italia se ha solicitado una prórroga en los plazos inicialmente previstos para fabricantes automovilísticos de producción reducida. En este artículo abordamos y analizamos la cuestión, planteando si resultaría o no viable, y la comparamos con la situación en España, donde ya se encuentra aprobada la Ley de Cambio Climático y Transición Energética, que sitúa esta prohibición de venta de vehículos que no sean de cero emisiones para el año 2040.