Desde el fin de Yugoslavia, el debate político en los Balcanes se ha reducido a un enfrentamiento entre nacionalistas y liberales. Sin embargo, una nueva izquierda anticapitalista ha emergido para la defensa de los bienes comunes y contra las crecientes desigualdades. Una coalición de la izquierda ecologista acaba de lograr la alcaldía de Zagreb, mientras que una izquierda soberanista gobierna en Kosovo.