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Izaskun Ormaetxea Cazalis, José María Duque Carro, Arantza Laka Eskauriaza
El diagnóstico social ha sido uno de los aspectos más complejos en trabajo social a lo largo de su historia. El presente artículo pretende poner de manifiesto la importancia de su desarrollo conceptual en aras a considerar la profesión del Trabajo Social como disciplina científica en un contexto de crisis sanitaria, social y económica. Para ello, partiendo del rol protagonista y cooperativo de la ciudadanía atendida, se define lo que es el diagnóstico social desde la clave de prestación técnica de derecho, que no solo fundamenta metodológicamente la intervención, sino que lo es en sí mismo. Se aclara cómo algunos instrumentos, herramientas y clasificaciones diagnósticas, estando al servicio del diagnóstico social, por sí mismos, no lo son. Por último, se expone la experiencia desarrollada en la Comunidad Autónoma del País Vasco en los últimos años, teniendo en cuenta su perspectiva histórica, pero significando principalmente el desarrollo conceptual construido en base a dinámicas de retroalimentación entre práctica y teoría. Este necesario desarrollo disciplinar precisa de la cooperación continuada entre las comunidades científica y profesional con el fin de obtener el consenso necesario. Para ello es imprescindible el liderazgo institucional de la profesión a través del Consejo General de Trabajo Social.
Social diagnosis has been one of the most complex aspects in social work throughout its history. This article claims to highlight the importance of its conceptual development to consider the profession of Social Work as a scientific discipline in a context of health, social and economic crisis. To do this, starting from the protagonist and cooperative role of the citizens served, we define what is the social diagnosis from the key of technical provision of law and that not only methodologically bases the intervention but it is in itself. We note how some diagnostic instruments, tools and classifications being at the service of social diagnosis, by themselves, are not. Finally, we present the experience developed in the Basque Country in recent years, taking into account its historical perspective but highlighting the conceptual development built on the basis of feedback dynamics between practice and theory. This necessary disciplinary development requires continued cooperation between the scientific and professional communities in order to obtain a necessary consensus. To achieve this, the institutional leadership of the profession through the General Council of Social Work is essential.
