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Violeta Pina Montaner
El pasado 16 de enero entró en vigor el Impuesto sobre las Transacciones Financieras, con el que España pretende gravar la adquisición onerosa de las acciones de determinadas sociedades españolas cotizadas, siguiendo el movimiento iniciado por otros países como Francia o Italia. Este impuesto, con el que el Gobierno español tiene previsto recaudar 850 millones de euros, reviste gran complejidad tanto por las dudas que plantean algunos supuestos de sujeción y exención como por la mecánica operativa con la que se va a efectuar su recaudación.
On 16 January, the Financial Transaction Tax entered into force, allowing Spain to tax the acquisition of listed shares issued by Spanish companies, following the trend initiated by other countries, such as France and Italy.
The Spanish Government expects to collect EUR 850 million through this tax which is very complex due to the doubts raised on the taxable events and applicable exemptions along with the procedure to be established for its collection.
