La publicación en la prensa de dos manifiestos de militares de extrema derecha ha desatado la polémica en Francia. Al mostrarse indignados por la supuesta indolencia del Gobierno y exigirle reaccionar ante el “desmoronamiento” del país por culpa de los “islamistas”, los “antirracistas” y las “hordas de las periferias”, los firmantes han participado de la tradición de los golpes de Estado.