Los beneficios que puede obtener una empresa contando con vendedores responsables, así como estableciendo las mejores prácticas para conseguir un buen clima ético en las estructuras comerciales, son notables. Pero ¿cómo lograr vendedores más éticos y responsables, que huyan de comportamientos indeseables? El primer paso es definir un código ético que detalle lo que es aceptable y lo que no en la relación de los vendedores con los clientes, competidores, empresa y compañeros